Como ya os he contando, estando en Arad, Marta y Victoria decidieron volver a casa y yo continuar hasta Şoimoş, que es una fortaleza en ruinas en medio de ninguna parte.
Victoria y Marta cogían el tren de vuelta a casa hacia las dos del mediodía y yo tenía que esperar hasta las tres. Así que las acompañé a la estación para comprar su billete. Lo que pasó allí fue mi primer momento esperpéntico de esta última etapa del viaje.
La cuestión es que los estudiantes tenemos dos tipos de descuento; uno simplemente con el carné de estudiante y otro con el cupón. A veces suelen coincidir los precios, pero otras veces no. Cuando no coinciden, es más barato con cupón que sólo con carné. Yo había mirado el precio del billete con cupón, que salía por 37,50 lei.
Llegamos a la taquilla, la taquillera nos atiende en rumano. Nos dice que sin cupón y cuando van a pagar el billete les pide 51 lei. Y empieza a gritar no se que del cupón (no había manera de entenderla), le intentamos explicar que el cupón si sirve, que hemos cogido hace dos días otro billete con cupón.... un jaleo.... gritos, la taquillera que ni nos mira (giraba la cabeza y se hacía la sorda)... Decidimos ir a otra taquilla, la taquillera sale corriendo de su asiento para hablar con su compañera... en estas que estamos discutiendo que si el cupón vale, que no vale, que nos devuelva el dinero del único billete que Marta había pagado... y aparece la policía!!!!! Sí, aquí llaman a la policía toooodo el tiempo. Cualquier cosa que les discutas y llaman a la policía... Como si la policía no tuviera trabajo!
Total, el policía nos pide la documentación (nosotras ya alucinando en colores) y nos lleva a la parte trasera de las taquillas. Ahí llega la taquillera borde y empieza a gritar, mientras el policía nos estaba intentando explicar (tranquilamente y despacio, cosa que agradecimos porque le podíamos entender...) y el policía le dice a la taquillera que se calle que está hablando él. La otra que se enfada aún más. El policía nos explica que a los cupones les falta un sello para ser hábil (dos días antes habíamos usado los cupones sin problema), y nos dice que según la ley, una vez que la taquillera ha sacado el billete lo tienes que pagar; que él nos entiende con que el cupón debería ser válido para el año escolar... Resultado, Victoria tiene que pagar su billete sin cupón. Le tiende el dinero a la taquillera que se lo arranca de la mano, empieza a gritar, el policía que e dice que se calle.... un cisco total.
Nos fuimos a comer algo, con un cabreo monumental, y se fueron a coger el tren. Yo fui un poco más tarde a comprar mi billete (yo tenía mi cupón bien, con su fecha de "válido hasta" su sello y todo). Evidentemente no fui a la taquilla que habíamos ido antes, fui a la segunda taquilla por la que habíamos pasado. La taquillera no me escupió porque había un cristal en medio, no he visto en mi vida a nadie más desagradable (ni en hacienda en plena campaña de la renta.... jajajajaja). Compro mi billete con el cupón, sin problemas y me voy al andén a esperar.



En seguida veo al fondo las ruinas, así que por lo menos estaba segura que iba por buen camino. Al llegar al pie de la colina donde están las ruinas, veo una tienda, y en la puerta un taxi, y pienso... bien! si a la vuela veo que no me da tiempo, cojo un taxi.
Y subo a las ruinas. Una subida super empinada, sin camino bien definido, rocas, barro.... (¿llegaré? jajaja).


Así que esperé como cinco minutos y vino el autobús (o algo lo más parecido posible a un autobús que se pueda encontrar en la Rumanía profunda... jajajaja). Iba yo sola, y el chofer muy majo, pero ni papa de inglés ni de español, así que conversación... limitada. Le pedí que me avisara cuando llegásemos a Radna, y le resultó bastante extraño. Cuando llegamos me avisó, pero me dí cuenta de por qué le resultó extraña la petición; porque para justo en la puerta de la estación (única parada.... jajajaja) que tiene un cartel bien grande que pone "Arad" jajajajaja.

Finalmente cogí en tren anterior al que tenía planeado. Radna-Deva, 3 horas. En Deva tuve que esperar 3 horas, así que aproveche para cenar algo en un McDonald´s 24 horas (y para cargar el móvil, que estaba casi sin batería!!!!). A las 00:40 cogí un tren para Alba Iulia (un pueblo cerca de Sibiu que tengo que visitar!!!), 2 horas de viaje. En la estación de Alba Iulia tenía que esperas dos horas más. Fui a la taquilla y me dijeron que para mi tren tenía que esperar una hora más (queeeee!!!!! que mi tren sale una hora más tarde de lo que pensaba???!!!! jajajajaja... no!!!! que tengo que esperar una hora para poder comprar el billete.... jajajaja... mi rumano da para lo que da.... y a veces mis traducciones van con pequeños fallos... jajajaja). Así que me voy a la cafetería de la estación, porque los bancos de la entrada no inspiran mucha confianza y huele maaaaal.
La cafetería no huele mucho mejor, los dos señores que hay (borrachos y desdentados, jajajaja) no inspiran mejor confianza, la camarera.... no tengo calificativos para definirla... jajja, el café de los peores que he probado aquí (y aquí el café no es muy bueno...) y de fondo manele (ya os hablé del manele, la música rumana con influencia turca...) a todo trapo!!!! jajajaja. Menuda hora de espera!!! jajajaja.



Alucino con este país!!!! A veces me encanta, a veces no lo entiendo, a veces me quiero ir a mi casa!!! jaja.